Los dinosaurios con
  cresta a menudo tenían vistosas protuberancias, crestas o púas en la cabeza.
  Al igual que los lagartos exhiben sus vivos colores y las aves se engalanan
  con sus plumas, algunos dinosaurios también destacaban gracias a su cresta de
  curiosa forma.
      ¿Por qué querían
  llamar la atención con su cresta? Los dinosaurios con cresta vivían en
  rebaños y, como otros animales sociales actuales, se comunicaban con otros
  miembros del grupo. Para eso, primero tenían que atraer su atención. Si
  quieres destacar en medio de una multitud, lo mejor es llevar un sombrero de
  copa. En lugar de sombrero, los dinosaurios con cresta tenían protuberancias
  en la cabeza.
      El Oviraptor era
  un dinosaurio con cresta que robaba huevos de los nidos desprotegidos de otros
  dinosaurios. No todos los cráneos suyos encontrados tenían cresta. Los
  científicos creen que sólo los machos la poseían. Podía distinguir si otro
  miembro de su especie era macho o hembra fijándose en la cresta.
      Imagínate que vives en
  un rebaño de dinosaurios, todos muy parecidos. Sería fácil verte separado
  de tu familia. La cresta ayudaba a estos dinosaurios a identificar a otros
  miembros de su grupo familiar. Las crías de hadrosaurio presentaban pequeñas
  protuberancias, mientras los adultos tenían crestas completas.
      En la época de
  apareamiento, los machos de las aves intentan llamar la atención de las
  hembras. Se atusan las plumas y exhiben sus bellos colores. Los machos de los
  dinosaurios quizá usaban su cresta con idéntica finalidad.
      Algunos dinosaurios
  tenían crestas muy curiosas. El Dilophosaurus era un carnívoro que
  recibió su nombre por el extraño bulto de su cabeza; significa reptil con
  dos crestas porque presentaban dos rebordes altos y estrechos que recorrían
  todo su cráneo. Probablemente usaba esta cresta para indicar a los amigos
  dónde estaba y con el fin de ahuyentar a los enemigos.
      En muchos libros sobre
  dinosaurios, el hadrosáurido Tsintaosaurus aparece con una cresta
  espinosa en la cabeza. También se han reconstruido maquetas de este
  dinosaurio chino, a partir de un hueso que sobresale de su hocico. Los
  científicos creen ahora que este largo y delgado hueso en realidad recorría
  horizontalmente el hocico y no se considera un dinosaurio con cresta.