A partir del año
1.830, aproximadamente, se han buscado fósiles de dinosaurios de forma
sistemática, y las técnicas básicas no han cambiado demasiado. El principio
consiste en extraer los esqueletos de la mejor manera y con el menor daño
posible. Como la mayor parte del país de los dinosaurios está tan alejado en
la actualidad, y debido al enorme tamaño de muchos ejemplares, el aspecto
logístico del personal, el mantenimiento y el transporte resultan tan
importantes como los aspectos científicos, como la interpretación del lugar
del hallazgo y de las piedras, el registro exacto de los descubrimientos o la
recuperación de todos los fragmentos de cada ejemplar.
Se han encontrado
dinosaurios en todo los continentes, salvo en la Antártida, hasta hace poco.
Sin embargo, a principios de 1.989, este espacio se completó cuando los
geólogos y los paleontólogos que trabajaban para el British Antartic Survey,
o Estudio Británico de la Antártida, descubrieron el esqueleto de un
dinosaurio. Como ya hemos señalado, sólo se encuentran dinosaurios en rocas
que datas desde el Triásico superior hasta el Cretácico superior, de 231 a
66 millones de años de antigüedad. Además, suelen ser frecuentes sólo en
depósitos terrestres, es decir, rocas arcillosas y areniscas depositadas en
ríos o lagos. Se conocen muy pocos especimenes procedentes de sedimentos
marinos, aunque estos hallazgos dependen de la remota probabilidad de que el
cuerpo fuera arrastrado por un río para llegar después al mar.
Aumenta la facilidad
del descubrimiento cuando las rocas adecuadas quedan expuestas en vastas zonas
y sujetas a una erosión relativamente rápida. Por tal motivo, en la
actualidad algunos de los yacimientos de dinosaurios más ricos se encuentran
en las regiones secas y baldías del centro de Estas Unidos, en Alberta,
Montana, Utah, Colorado y Arizona; las pampas abiertas de Argentina y Brasil,
en América del Sur; la sabana seca de Tanzania, Zimbabwe, Sudáfrica, Níger
y Marruecos, en África; las planicies centrales de India; el desierto de Gobi,
en Mongolia; las planicies del centro y norte de China; y las tierras de
pastoreo del este de Australia. En el pasado, se hallaron fósiles de
dinosaurios en cientos de localidades de toda Europa, pero en la actualidad se
encuentran muy pocos, porque los tiempos y las costumbres han cambiado. Hasta
alrededor del año 1.900, en Europa se extraían piedras para la
construcción, y los picapedreros hallaron docenas de esqueletos de
dinosaurios. Ahora que se extrae muy poca piedra, y cuando esto ocurre se
realiza el trabajo mediante máquinas enormes, es muy raro encontrar
esqueletos de dinosaurios.