Roedores
Los roedores son un orden de mamíferos euterios o placentraios, con cuatro incisivos, uno a cado lado de cada mandíbula, en forma de cincel, sin raíces, con crecimiento continuo y con el esmalte mucho más delgado por detrás. Faltan los caninos, que dejan un diastema o espacio sin dientes entre los incisivos o los premolares o molares; éstos son muy parecidos y están dotados de crestas y repliegues de esmalte. Poseen unas bolsas en las mejillas, donde acumulan el alimento que recogen rápidamente, yendo de un lado a otro. En general, son pequeños, aunque los hay, como el capibara, de América del Sur, de hasta 1,25 metros de longitud; su forma es muy variable, poseen sentidos muy agudos y sus plantígrados y son plantígrados casi siempre con 4 ó 5 dedos provistos de uñas. Su distribución abarca todos los continentes y muchas islas, desde el nivel del mar hasta casi los 6.00 metros de altura, y desde los desiertos más áridos hasta la selva tropical y algunos frecuentan los lugares o ríos y arroyos, los castores, por ejemplo. Rápidos o lentos, los hay corredores, saltadores, hipogeros, arborícolas y hasta planeadores; muchos forman grupos migradores, como los lemingos, o moran en extensas y complicadas ciudades subterráneas, como los perrillos de las praderas. Su número de especies que el de las de todos los restantes órdenes de mamíferos, pero aún es más sorprendente el número de individuos que las forman, debido a su excepcional polificidad, que, junto con su rapidez y sus modos de ocultación, constituyen la defensa de estos animales frente a los predadores, más fuertes que ellos. Este número, que en circunstancias favorables se torna inmenso, constituye una grave amenaza para los seres humanos, pues los roedores destruyen sus obras, devoran sus alimentos e incluso transmiten gérmenes patógenos. Se distribuyen en tres subórdenes; los esciuromorfos, parecidos a ardillas; los miomorfos, parecidos a los ratones y ratas; y los histricomorfos, parecidos a los puerco espines. Antiguamente abarcaba el orden de los roedores, con el nombre de roedores simplicidentados, y los lagomorfos, los conejos, libres, con el nombre de roedores duplicidentados. Los simplicidentados sólo poseen dos incisivos superiores y dos inferiores, para distinguirlos de los duplicidentados que tienen cuatro incisivos arriba, dos delante y dos detrás, y dos incisivos inferiores. Esta última clasificación no tiene valor taxonómico, no vale. |