Hasta hace poco tiempo, el éxito de los dinosaurios sobre los rincosaurios,
dicinodontes y cinodontes, se explicaba según un modelo competitivo. Se
presumía que la posición vertical de los dinosaurios, y otras supuestas
ventajas, les permitió vencer a otros animales del Triásico y provocar su
extinción.
Hace unos 225 millones
de años se produjo una gran crisis, alrededor de cinco millones de años
después de los dinosaurios pequeños. Numerosos grupos de animales perecieron
en la tierra y en el mar como consecuencia de una gran alteración climática
o por alguna otra catástrofe. Existen pruebas de que los vegetales
experimentaron importantes trastornos evolutivos en torno a esta época, y es
posible que los rincosaurios y los dicinodontes se extinguieran cuando
desaparecieron los vegetales que constituían su fuente de alimentación. De
todos modos, se produjo una extinción masiva hasta 225 millones de años. Una
extinción masiva es la desaparición de un amplio corte transversal de grupos
vegetales y animales en un período relativamente breve. En ese momento se
extinguieron alrededor de una docena o más de grupos de reptiles, incluyendo
varios muy significativos, como los rincosaurios, los dicinodontes, los
etosaurios y diversos grupos de cinodontes y tecodontos. De este modo quedaron
numerosos espacios vacíos en la ecología y en los posibles estilos de vida
de las plantas y animales terrestres, con lo cual los grupos sobrevivientes
tuvieron grandes oportunidades para ocupar y llenar estos espacios. Los
escasos dinosaurios primitivos, que antes de la extinción masiva nunca
llegaron a representar más del uno o dos por ciento dentro de sus
comunidades, prosperaron hasta ocupar el cincuenta por ciento, o más, al cabo
de unos pocos millones de años.
Este modelo explicativo
del éxito de los dinosaurios, su adaptabilidad y el oportunismo para ocupar
ecoespacios vacíos, es muy diferente del antiguo modelo competitivo. Ya no se
propone una batalla a largo plazo, en la cual se enfrentan los grupos enteros,
los unos contra los otros, de forma global. Los dinosaurios tuvieron la
fortuna de llegar en el momento oportuno, y aprovecharon la ocasión. Sin
embargo, no cabe duda de que el elemento competitivo también desempeño un
papel. Los pequeños dinosaurios del tipo de Lagosuchus contaban con
una posición erguida eficaz, con todas sus ventajas, y eran carnívoros
ágiles, capaces de perseguir a gran variedad de presas. Así como los
mamíferos aprovecharon la oportunidad y sustituyeron a los dinosaurios,
después de su extinción, alrededor de 160 millones de años después, es
probable que los dinosaurios deban un 95 por ciento de su éxito al hecho de
estar en el lugar adecuado en el momento preciso, y un cinco por ciento a sus
atributos competitivos.
¿Por qué no
prosperaron los mamíferos hace 225 millones de años? Sus antepasados
próximos, los cinodontes, ya estaban presentes sobre la Tierra. Los
dinosaurios se impusieron en primer lugar y llegaron a alcanzar un tamaño
considerable, mientras los primeros mamíferos no eran más grandes que un
ratón. Mientras los dinosaurios dominaron la Tierra, estos pequeños
mamíferos primitivos no podían oponérseles; por tanto, no superaron el
tamaño de un gato hasta que los dinosaurios estuvieron extintos.
Inmediatamente después
de la extinción masiva de dicinodontes, rincosaurios, etosaurios y demás,
transcurrieron algunos millones de años de evolución rápida mientras
aparecían grupos nuevos para ocupar los ecoespacios que habían quedado
vacíos. Había lugar para los herbívoros de todos los tamaños, y para los
carnívoros de tamaño mediano, para que persiguieran las resto de los
animales supervivientes. Las rauisuquios superaron la extinción masiva y se
convirtieron en los carnívoros más importantes durante otros 17 millones de
años.
Una segunda extinción
masiva, que se produjo durante duran el Triásico superior, hace 208 millones
de años, fue testigo del final de los rauisuquios y los fitosaurios, los
últimos tecodontos, así como de algunos cinodontes y otros grupos. Los
dinosaurios, que ya se habían impuestos como herbívoros entre medianos y
grandes, y carnívoros entre pequeños y medianos, volvieron a adaptarse,
mientras aparecían en escena nuevos herbívoros especializados, además de
otros carnívoros más grandes.
Ente período de
perturbación del Triásico superior, interrumpido por dos extinciones
masivas, presenció no sólo la expansión en dos fases de los dinosaurios
hasta ocupar una posición de predominio sobre la tierra, sino también la de
otros grupos importantes de vertebrados, es decir, animales provistos de
columna vertebral. Las tortugas, los esfenodóntidos que son unos animales
similares al lagarto, los pterosaurios, los cocodrílidos y los mamíferos
primitivos proceden de esta época. Sin duda, en una escala más amplia, este
episodio en la prolongada historia de la evolución de los vertebrados
representa una transición fundamental entre los grupos más antiguos y la
aparición de muchos nuevos grupos que todavía persisten en nuestros días.