Ictiosaurios
Los ictiosaurios
fueron un orden de reptiles de la subclase de los euriápsidos.
Medían de de 1 a
10 metros de longitud. Estaban adaptados a la vida marina con su cabeza
grande, cuerpo fusiforme, extremidades pares en forma de aletas, mayores las
anteriores, y con 5 a 12 dedos provistos de numerosas falanges y cola
ahorquillada; hocico largo y mandíbulas provistas de numerosos dientes, lo que
demuestra su régimen carnívoro; y cavidades orbitales muy grandes, signo de
ojos grandes y de posible vida abisal.
Hay fósiles tan
excelentemente conservados, que de su estudio se ha podido conocer su dieta de
peces y cefalópodos, y saber que incubaban internamente sus huevos, esto es,
que eran ovovivíparos.
Los primeros aparecieron
en el Triásico tardío y alcanzaron su clímax en el Jurásico, para extinguirse
misteriosamente al final del Cretácico junto con otros reptiles.
En total durante 160
millones de años dominaron los mares, mientras que los dinosaurios dominaban
la tierra firme.
Ichtyosaurus:
Significa reptil pez. En las mandíbulas tenía unos dientes largos y
afilados. Al igual que sus parientes los reptiles reptiles terrestres y los
voladores, respiraba aire. Inhalaba el aire asomando las fosas nasales fuera
del agua. Sus grandes cuencas oculares nos permiten suponer que tenía buena
vista. Al a igual de los peces, no tenía cuello. Esto les facilitaba el
lanzamiento por el agua. La aleta dorsal ayudaba a que se
mantuviera
recto.
Nadaba moviendo las aletas, como las tortugas actuales. Los científicos han
averiguado que comía estudiando sus fósiles y observando el contenido de sus
estómagos. Los mejores fósiles muestran que comía peces, marisco, moluscos,
animales parecidos a los calamares y a las gibas actuales. De vez en cuando,
capturaba un pterosaurio. El fósil de uno encontrado en Alemania muestra
claramente la silueta de su cuerpo. La piel era gruesa y lisa. La piel tersa
era imprescindible para
favorecer el aerodinalismo. Su amplia cola se movía de
un lado a otro, como la de los tiburones actuales. Nadaba moviendo la cola,
como los tiburones o atunes actuales. Con las aletas llevaba la dirección.
Podía alcanzar velocidades de hasta 40 kilómetros por hora. Utilizaba la aleta
dorsal para mantener el equilibrio. Sin esta aleta sus cuerpos hubieran sido
demasiado inestables. Las tablas de surf y los barcos de vela tienen una aleta
parecida en la parte inferior, para mantenerse horizontales en el agua.
Empezó a disfrutar de la libertad de la vida del agua. Su cuerpo se adaptó
cada vez más a la vida acuática. Era muy buen nadador, pero también llevó a
cabo otras adaptaciones. Los reptiles actuales, como los cocodrilos, ponen
huevos en tierra. Este reptil y los demás Ictiosaurios eran reptiles, pero se
habían adaptado tan bien en el agua que no salían de ella para desovar. Sus
crías nacían ya vivas dentro del agua, como las ballenas o los delfines. Una
vez alumbradas, las crías probablemente se unían al grupo y, por razones de
seguridad, nadaban junto a los otros Ictiosaurios. Medía unos 2 metros de
largo.
Eurhinosaurus:
Este era el Ictiosaurio con los dientes más grandes y afilados. Presentaba
unos mandíbula superior muy larga, con unos afilados dientes que se le salían
hacia los lados. Este hocico en forma de sierra probablemente lo usaba para
buscar alimento. Seguramente también podía mover la cabeza con agilidad para
ensartar los peces que pasaban cerca de él.
Shonisaurus:
Fue un animal enorme, encontrado en Nevada, EE.UU. Con sus 15 metros de largo
fue el Ictiosaurio más grande de todos que se conoce. Su cuerpo enorme
alcazaba el tamaño de la actual ballena yubarte.
Grippia: La
única pista que tenemos de los primeros Ictiosaurios es de un animal llamado
Grippia. Cinco millones de años después evolucionó otro animal llamado
Mixosaurus.
Mixosaurus:
Este Ictiosaurio tenía el cuerpo delgado, las aletas pequeñas y la cola
estrecha. Otros Ictiosaurios posteriores la tenían más ancha como la de los
tiburones actuales.
Ophtalmosaurus:
Significa reptil ojo. Medía 3 metros y medio, más que otros Ictiosaurios
del Triásico. Tenía los ojos inusualmente grandes. También era algo distinto a
otros Ictiosaurios porque carecía de dientes. Nadaba en grupos como los
delfines actuales y las marsopas.
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