Barosaurus
Barosaurus: Significa
reptil pesado. Su nombre es debido a que el famoso paleontólogo
norteamericano Marsh en 1.890, calculó el peso y eran unas 10 toneladas,
equivalente a lo de dos elefantes. Era enorme, con su cuello largo y su
prolongada cola, que esgrimía como arma contra sus enemigos. Aunque se han
encontrado pocos fósiles suyos se cree que se desplazaba en manadas,
costumbre que también suponía una buena protección frente a los
depredadores. Como todos los miembros de la familia de los saurópodos, tenía
una gran garra curva en el dedo interior de ambas patas delanteras. Los huesos
del largo cuello, es decir sus vértebras, eran huecas y pesaban poco, con lo
que podía alzar la cabeza cómodamente para alimentarse. Unas vértebras
macizas le hubieran impedido sostener el peso de su propia cabeza. Algunos
científicos creen probable que alzara la cabeza sólo de vez en cuando. De lo
contrario, la sangre habría dejado de regar el cerebro, porque el corazón
estaba demasiado lejos. Pero otros científicos creen que quizá tenía unos
ocho corazones para impulsar la sangre por todo su inmenso cuerpo. Su
larguísimo cuello tambaleante le permitía mover la cabeza en todas
direcciones y medía unos 9 metros, por lo que era muy largo. Medía 25 metros
de largo y 7 de alto, lo cual le permitía comer de las hojas más altas de
los árboles, como las jirafas actuales. Si a un dinosaurio como éste sin
morir por la enfermedad ni por los ataques de los carnívoros puede que
pudiera vivir los 100 años de edad. Perteneció al grupo de dinosaurios de
los diplodócidos. Pudo vivir en una época en la que el clima era cálido,
con alternancia de estaciones secas y húmedas. Las espesas capas de
areniscas, arenas fluviales y gravas encontradas en las antiguas rocas del
Dinosaur National Monument muestran la existencia de períodos de fuertes
lluvias e inundaciones. Las grietas del barro fosilizado indican que hubo
épocas de sequía. Sólo podía hacer una cosa cuando las estaciones
cambiaban, marcharse. Del mismo modo que los antílopes y cebras emigran hoy
por las actuales llanuras de África, los dinosaurios herbívoros del período
Jurásico dejaban tras de sí las plantas muertas y secas, en busca de nuevos
pastos. Los científicos han desterrado pisadas fosilizadas de dinosaurio,
dejadas en la arena y el barro blandos, que dan una idea de la rapidez a la
que se desplazaban los animales. Hasta ahora no se han identificado huellas de
este dinosaurio, pero las que se han encontrado de otros saurópodos sugieren
que debió andar a unos 7 kilómetros por hora. Algunos científicos creen que
pudo alzarse sobre sus patas traseras para defenderse de sus agresores. En
este caso, la cola habría servido de palanca y de soporte. No podía aguantar
durante mucho tiempo esta posición erguida. Sus músculos y sus huesos
hubiesen estado sometidos a una tensión extraordinaria. El clima cálido y
húmedo de la época favorecida el crecimiento de una gran cantidad de plantas
capaces de satisfacer el monstruoso apetito del dinosaurio. Aunque no había
hierbas, se alimentaba de helechos, equisetos, gingkos, coníferas y muchas
otras plantas que todavía existen hoy. Recoge la materia vegetal con sus
dientes en forma de clavo y luego se la tragaba entera. Una vez en su
estómago, la comida era triturada mediante unos guijarros brillantes y duros
llamados gastrolitos, y convertirlo en una pasta espesa. Tenía que estar
atento al peligro. Si le habría amenazado un carnívoro le hubiera amenazado
y fustigado con la cola y así hacerles morder el polvo. Fue descubierto por
Earl Douglas en 1.912 en Utah. Vivió hace unos 150 millones de años en el
período Jurásico superior en el oeste de Norteamérica, en Dakota, Utah y
Wyoming, y en Tanzania, África Oriental. Se han encontrado 4 quintas partes
de todo el animal. Estas pruebas fósiles quieren decir que África y
Norteamérica estuvieron unidas cuando apareció esta especie de dinosaurio.