El pleno del Congreso de los Diputados aprobó ayer día 29 una moción del grupo parlamentario socialista que solicita al Gobierno que de los pasos necesarios para el establecimiento de una "tarifa plana" para los usuarios de Internet. La votación contó con la totalidad de los votos de la cámara, aunque no todos coincidieron en que como esta ha de llevarse a la práctica.

El punto aprobado "insta al Gobierno a adoptar los pasos necesarios para el establecimiento de una tarifa plana por el acceso a Internet por parte de usuarios residenciales, pymes, y en centros educativos y sanitarios".

¿Qué tarifa plana?

Si bien la proposición fue aprobada por unanimidad, no existía una clara unanimidad de criterios en lo que significa la "Tarifa plana". Para el Partido Socialista y otros grupos parlamentarios el motivo de esta moción era el de equilibrar los precios de tal manera que fuera posible un acceso de todos los ciudadanos a las nuevas tecnologías de la información, y eso pasa de indudablemente por una tarifa plana.

Para el PP se debe de facilitar ese abaratamiento aunque sin precisar una formula concreta. Así la portavoz de este grupo, Ana Mato, presentó una enmienda a la propuesta socialista en la que, aun apostando por una rebaja de las tarifas locales y de Internet, no exponía de que forma se podía llegar a conseguir este objetivo. Para Ana Mato, una de las formulas podrían ser por ejemplo el establecimiento de planes descuento, ya que al imponer la tarifa plana a Telefónica como fórmula de ese abaratamiento podrían derivarse problemas jurídicos. La enmienda del PP fue rechazada y, finalmente, el partido del gobierno se sumó a la iniciativa socialista en este punto.

No se acaba aquí: nueva moción la semana próxima

Más lejos aún de la proposición socialista se encuentra el anuncio que ha realizado el portavoz del Grupo nacionalista catalán CiU, Lluis Recoder. Este explico en su argumentación de voto que en el contexto de un sector liberalizado la última subida de las tarifas locales era una medida "grave, injustificable y lamentable por parte de la antigua compañía monopolística, con el apoyo del Gobierno, que perjudica notablemente el desarrollo de Internet".

Lluis Recoder indicó que la reciente subida de las tarifas locales no se entendía porque estaba seguro de que cuando se afiance la competencia será la propia Telefónica la que presionará a la baja los precios de Internet.

En este sentido, CiU presentará la próxima semana una proposición no de ley en esta misma línea en la que no sólo pedirá una tarifa plana de Internet sino que exigirá que dicha tarifa se ajuste a la media de las tarifas que aplican de los países más competitivos de nuestro entorno. Asimismo, incluirá en su proposición otro punto que exige al Gobierno que obligue a Telefónica a no cobrar las conexiones fallidas.

La Moción

La solicitud de tarifa plana al Gobierno, formaba parte de una moción presentada por el Grupo Parlamentario Socialista que contaba de cuatro puntos: la derogación del aumento de tarifas del 31 de julio, reducción de las tarifas de interconexión entre operadores, y eliminación de restricciones a las llamadas locales y el punto referido a la tarifa plana.

Salvo el apoyo a la propuesta de tarifa plana, nacionalistas y PP rechazaron por 159 contra 147 los otros tres puntos.

La proposición del PSOE fue defendida por el diputado Jesús Caldera, quien en la argumentación de esta calificó el denominado "reequilibrio tarifario" de "tarifazo", el cual afecta a 18 millones de usuarios, y dijo que ésta era la mayor subida de la historia de España.

Señaló que Telefónica recoge los beneficios que le brinda el Ministerio de Fomento con la subida de las llamadas locales y acusó a dicho departamento de "fomentar la competencia desleal", al no permitir la competencia en el mercado metropolitano.

Agregó que Fomento era culpable de subir el minuto de las llamadas locales en horario punta de 1,9 a 4,5 pesetas, un 137 por ciento más.

En una conferencia de prensa celebrada el pasado lunes, para dar a conocer la moción, la secretaria general del Grupo Socialista, María Teresa Fernández de la Vega, declaró que “el Gobierno es el único responsable de la cuenta de teléfono”, y que quiere que se conozcan “los ingresos de la compañía a costa de los usuarios”. Es en este sentido donde se encuadra la propuesta (finalmente derrotada en el Parlamento) de que no se permitan nuevas subidas hasta que Telefónica presente sus cuentas y que estas sean auditadas por la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones.

La AUI sigue en activo

Aún a pesar de todas las criticas dirigidas a ella, acusándola de otorgarse una representatividad que no le corresponde, la Asociación de Usuarios de Internet ha remitido una carta al Ministerio de Fomento y a la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones solicitando que no sean aprobados los "bonos" presentados por Telefónica. Además su oposición a estos "bonoplanes" se concreta en que en cada momento se aplique la mejor tarifa disponible al usuario, de manera que se evite, por ejemplo, que en horario nocturno sea más caro conectarse con BonoNet que acogerse a las tarifas normales –que han sufrido un mínimo incremento con el “tarifazo”-. Por otro lado, la AUI pide que exista algún tipo de aviso por parte de Telefónica para que el usuario sepa en qué momento se le termina la oferta. La asociación explica además que la complejidad de estos planes es su principal inconveniente como medida aplicable hasta que de una forma u otra se establezca una tarifa plana para el acceso a Internet.

Coincidiendo además con la presentación de la moción, representantes de la AUI visitaron el Senado para dar a conocer sus propuestas a la Comisión Especial sobre Redes Informáticas. La AUI propuso once medidas a los senadores, entre las que destaca la posibilidad de tarificar por "bit" en lugar de por tiempo, la promoción de Internet para el desarrollo de negocios; acciones de formación para padres y profesores, y no sólo para estudiantes; la promoción de Internet en sectores estratégicos como el Turismo; y la promoción del idioma español. Por último, los usuarios apuestan por la creación de la figura del "ingeniero multimedia", tanto con estudios de Formación Profesional, como técnico o superior; el fomento de nuevas conexiones a la Red; la elaboración de un departamento de consultas; y la promoción a la libertad de expresión, sin la creación de leyes especiales pero con el respeto de las vigentes.