El tarifazo del pasado mes de agosto tuvo efectos muy negativos en los índices de
crecimiento de Internet en España, y no porque lo dijera la oposición, los grupos de
defensa del consumidor o en los grupos de discusión se pusiera a caldo a Telefónica,
sino porque lo constató el Estudio General de Medios, uno de los más prestigiosos
métodos de medir la audiencia en España.
Según el EGM, entre los meses de febrero y marzo pasados, más de dos millones de
españoles accedieron a Internet, lo que supone un crecimiento del 16,39% respecto de la
oleada anterior (octubre-noviembre de 1998), cuando el crecimiento registrado en esa fecha
fue de tan sólo el 5,54% respecto a la oleada anterior. A pesar de la considerable
mejoría, todavía no se han alcanzado los niveles de hace un año, cuando los índices
superaban el 20%.
Entrando más en el detalle, el EGM indica que el 5,8% de los españoles mayores de 14
años usan Internet al menos una vez al mes, una cifra aún muy alejada de las de países
de nuestro entorno, como Bélgica (16%), Alemania (8,7%), Irlanda (13,7%) y Holanda
(13,7%), y a años luz de otros europeos algo más remotos, como Dinamarca (22%), Suecia
(37,8%) o Estonia (10%), aunque en la línea de nuestro vecino galo -un 5,2% el pasado
mayo-.
Un signo de madurez es el aumento en el pago por parte del usuario (50,4%, frente al
36,4% del trabajo). La proporción entre los sexos, en cambio, permanece casi constante; 7
de cada 10 internautas son varones. Por comunidades, los catalanes siguen navegando más
(9,7% de la población adulta), seguidos de madrileños (8,8%) y riojanos (7%).