En su escrito, la Asociación propone dos tarifas planas, una para horario nocturno y
fines de semana y otra para uso continuo.
Para horario nocturno y fines de semana, la AUI ha propuesto una tarifa plana mensual
no superior a las 2.000 pesetas mensuales, que daría derecho a conectarse ilimitadamente
a Internet entre las 8:00 de la tarde y las 8:00 de la mañana en días labores, y durante
todo el día en fines de semana.
Según Javier Solá, director de la Asociación, "En horario nocturno y fines
de semana el uso masivo de Internet no produce saturación en las centrales telefónicas,
ya que los circuitos están bastante descargados".
Para su uso durante el día, la AUI ha propuesto una tarifa no muy superior a las 6.000
pesetas mensuales. Para llegar a esta cantidad, los estudios de la AUI se basan en una
propuesta de tarifa plana presentada por Telefónica en 1997 para conectar sedes de una
misma empresa a través de RDSI. En esta propuesta se mencionaba la cantidad de 8.000
pesetas mensuales como tarifa plana. También se toma como referencia el recién firmado
acuerdo para centros de enseñanza y las declaraciones de D. Javier Revuelta, Consejero
Delegado de Telefónica.
El gran problema para la tarifa plana diurna es el peligro de la saturación de
centrales telefónicas por usuarios que estarán conectados todo el día (al no tener un
coste adicional por cada minuto de conexión, optan por no desconectarse). En otros
países esto se va solucionando por medio de la discriminación (reconocimiento y
separación) de llamadas de voz de las llamadas a Internet. Antes de entrar en la central
de voz, las llamadas a Internet son reconocidas y enviadas directamente a un centro de
gestión de datos, de forma que la central telefónica de voz no se colapsa. El
tratamiento separado de datos permite reducir costes ostensiblemente, de ahí que la
propuesta de la AUI sea más baja que la propuesta de Telefónica en 1997.
Javier Solá afirma que "Hasta ahora la AUI se ha opuesto a las tarifas planas,
por el peligro que suponían para las redes tradicionales, como ya se ha visto en EE.UU.,
donde ha sido necesario encontrar soluciones para evitar el colapso de las centrales
telefónicas." Y añade "Ahora la tecnología está lo suficientemente
madura como para poder hablar seriamente de tarifas planas, y las vemos como una opción
que debe ser considerada muy seriamente ante la inminente subida de las tarifas locales,
que podrían hacer que la factura telefónica de los internautas aumentara en casi un 34%,
frenando el desarrollo del Comercio Electrónico y la prestación de servicios a través
de Internet en nuestro país." Javier Solá termina diciendo "Las diferentes
fuerzas sociales insisten en que desean potenciar el uso de Internet y el Comercio
Electrónico en España. Esperemos que esto sea cierto y apoyen nuestra propuesta."