Con el mismo equipo de dirección y producción que el fugitivo y U.S. Marshall, Andrew Davis realiza este remake de la película de Hitchcock basada en una obra de teatro titulada Dial M for murder. Es una de los siete remake de este director que se van a estrenar o que se han estrenado.

En esta ocasión y para llenar los cines se ayuda de unos actores de primer nombre Michael Douglas, Gwyneth Palthrow y Vigo Mortesen, aparte de este detalle y los obvios avances tecnológicos, esta versión tiene muy pocas diferencias con la de Hitchcock; que el tercero en cuestión encargado de asesinar a la mujer es, así mismo, su amante es una de estas diferencias, y quitando los teléfonos móviles y los centímetros de piel que se le ven a la actriz, no hay mayor diferencia.

La película no la vamos a comparar con su homónima, que por cierto fue una de las más infravaloradas de su director, es entretenida aunque quizá no consigue gran complicidad, mantiene sus momentos de tensión y claro , eso de saber ya la historia resta emoción. En definitiva una película correcta que se deja ver.